Los efectos nocivos del tabaco son especialmente dañinos durante las fases críticas del desarrollo neuronal
Los niños que crecen en un entorno en el que se fuma tienen mayor riesgo de padecer ansiedad, depresión y trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Esta es la principal conclusión del estudio llevada a cabo por el equipo liderado por la investigadora clínica y pediatra Melinda Mahabee-Gittens de la Universidad de Cincinnatti (EEUU). La investigación ha analizado la prevalencia y las correlaciones de las condiciones actuales de salud mental y neurodesarrollo de 21.539 niños estadounidenses, de entre 6 y 11 años, que viven en entornos con humo. De los niños analizados que convivían con un fumador, con o sin exposición al humo del tabaco en el hogar, el 22,1% desarrolló trastornos mentales, problemas de comportamiento (21,7%), trastorno por déficit de atención con hiperactividad (20,5%), depresión (21,7%) y problemas de aprendizaje (19,3).
El diario El País ha elaborado una noticia al respecto en la que ha colaborado el Grupo de Promoción de la Salud de la AEP. Puedes ver la noticia pichando aquí.
Fuente de la foto: El País.